Bajo la piel todo los conflictos
no sea que al desembozarlos
reunamos suficientes motivos,
sumemos tantos despropósitos,
nos movamos a desentonarnos.
Sobre el terreno un mar de posibilidades,
así cuantas causas sean auténticos motivos,
aún cuantos motivos sumen necesidades.
Ya en el proceder de la vida
traten tantos o cuantos furtivos,
temas terrenales, naturales,
que interaccionen sin holismos.
Discurso inteligible.
Así quiero escucharla,
dada para desecharla;
son momentos singulares
de procesos neuronales.
La palabra esquiva.
(En brainstorming)
Conjugando un baile de propiedades,
un abrupto vals de causas generales,
se dan cita las partes elementales.
Tocan partitura de combinaciones,
compuestos límites a infinidades,
pues se entregan a cifras singulares.
Y no dejan indiferente a nadie.
En el tramo que recorre un reflejo,
pausa de colores inimaginables
de suntuosas nebulosas espaciales,
entre órbitas trazadas como pasos,
sobre estelas que surcan el ocaso,
son cometas de recónditos lugares
los que dictan la sentencia de la vida.
También dictan la sentencia de la muerte.
Y no dejan indiferente a nadie.
El cosmos.
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