AGUDIZAR
LA INTUICIÓN:
Para empezar, diremos sobre este tema que se
sustenta mayoritariamente sobre las bases o premisas de la forma de concebir la
teoría cuántica y no en las ramas de la psicolingüística o la literatura
creativa.
La evolución en los avances científicos a lo
largo de los últimos años, está muy patente en algo tan práctico como son las
predicciones y en concreto en las previsiones meteorológicas, demostrándonos de
manera clara que estas, son cada vez más fiables y prolongadas en el espacio de
tiempo. Unos conceptos tan cotidianos sin embargo, marcan las metas de la
ciencia actual que pretende extender estas formas de predicciones a todos los
campos de la física que rigen nuestro universo. Para ello hacemos uso de la
tecnología necesaria que tanto nos ha ayudado a alcanzar, los enormes pasos en
nuestro estudio del entorno.
De alguna manera no tan compleja, aunque
pueda parecer lo contrario, nuestro cerebro cuando está bien entrenado y
activo, puede funcionar como uno de los ordenadores que utilizamos a diario,
analizando los cientos de datos percibidos, la mayor parte de las veces de una
forma inconsciente. En el momento en que decidimos indagar sobre ciertos temas,
nos especializamos en aquellos campos que nos hacen destacar en la vida. Mediante
este proceso tan curioso, formamos nuestra configuración cognitiva sobre
ciertos temas en concretos y por encima del resto de especializaciones en mayor
o menor medida, según hayamos profundizado en la materia mediante estudios,
actividades e investigaciones. En definitiva, nos convertimos en los
científicos analistas de nuestros propios placeres y pasiones.
Todo este galimatías científico y neuronal,
lo podemos trasladar sin problemas hasta la literatura, el tema que nos
interesa, teniendo siempre en cuenta que la mayoría de estas capacidades de
nuestro intelecto, se aplican a todos los campos de la vida. Desarrollemos pues,
dentro del campo de la literatura, a nuestra afición a la lectura, un instinto afinado
y que nos ayude a elegir nuestras futuras adquisiciones de una manera acertada.
Si dejamos que nuestras compras o elecciones (al menos una de cada varias) sean
producto de nuestra decisión más instintiva, nos guiaremos por los deseos
internos, en vez de dejarnos llevar por una portada, un cartel publicitario o
un anuncio televisivo, que tienen más que ver con el producto de ventas de una
editorial que de nuestros gustos internos. Estas decisiones tal vez sean al
inicio poco acertadas, sustentada en datos que no manejamos conscientemente
pero que podremos desarrollar y refinar para darnos mayor profundidad en las futuras
elecciones adquisitivas.
PROPUESTA
PARA EL EJERCICIO:
Como ayuda inicial, podemos crear una pequeña
lista o recordatorio (puede ser mental) con los temas que nos interesan a la
hora de elegir un libro, por ejemplo, utilizando los siguientes parámetros: GUSTOS,
GÉNEROS, RECOMENDACIONES, TÍTULOS, AUTORES, etc. Para rellenar esta lista
usaremos los datos que vayamos oyendo y/o queramos destacar: un manuscrito
pendiente de leer en el pasado, una lectura que se ha mencionado en tu entorno,
una recomendación del bibliotecario o librero, etc. Al inicio podríamos utilizar dos o tres de
estos parámetros de nuestra lista, al visitar una tienda o biblioteca, teniendo
en cuenta que los datos de partida ni siquiera deben ser obligatorios es decir,
podemos adquirir un título desconocido de un autor, anotado en nuestra lista
con otro título diferente. Con el paso del tiempo, utilizaremos menos
referencias en las nuevas elecciones, dejándonos guiar más a menudo por nuestra
intuición. De esta manera al final, habremos creado una serie de patrones o
posibilidades en nuestro subconsciente que nos sorprenderá con descubrimientos
que de otra manera, jamás habríamos podido encontrar.